El secreto de Vicky (2021): Reseña sin spoilers

Reseña sin spoilers de Mystere / El secreto de Vicky (Denis Imbert, 2021).

 

TEXTO ORIGINAL

Mystere es un largometraje francés de 2021. Yo no quería verlo porque el título fue adaptado en la mayoría de los países como «El secreto de Vicky», «Vicky y su misterio» y otras variantes por el estilo. Este era un título que no me podía tomar en serio, porque la sinopsis dice que trata de una niña que adopta a un perrito que luego resulta que no era un perrito. Y el cartel muestra a la pequeña Vicky abrazada a un lobo. ¡Pues vaya birria de misterio! ¿«El secreto de Vicky»? ¿Qué secreto? ¡Si es un lobo!

Pero con título cliché y todo, me animé a verla y vale la pena superar ese prejuicio inicial.

El secreto de Vicky es una fábula para toda la familia. Contiene elementos de un cuento infantil tradicional: aparece el ermitaño de la cumbre, la niña de la caperuza roja, y por supuesto, el lobo. En esta película, el lobo es una presencia neutral de la naturaleza. Es tanto la vida como la muerte. Cuando las personas lo miran con odio y temor, el lobo muestra sus colmillos. Cuando lo aceptan con amor, es un gran amigo. Esta es una de las razones por las que el ermitaño llama al lobito «Misterio».

El otro misterio del cuento es la duda que preocupa al protagonista adulto. El padre de Vicky es viudo. Desde que Vicky perdió a su madre, ya no habla delante de su padre. Es lo que en las últimas décadas se ha venido a mal denominar mutismo selectivo, pero en el mundo del autismo preferimos llamar mutismo situacional.

Vicky es capaz de hablar, pero prefiere no hacerlo delante de su padre porque tiene conflictos emocionales por solucionar. Y el padre se culpa por partida doble porque es cirujano y siente que debió haber operado a su mujer personalmente. Digamos que en un período breve de tiempo ha perdido a su cónyuge, la voz de su hija y su propia autoconfianza como cirujano. Entonces se tortura pensando: ¿por qué mi hija ya no me habla? Y se la lleva a vivir un año sabático a la casa de la montaña. En un relato de Stephen King esto acabaría fatal, pero como es una fábula de buenos sentimientos es una idea fantástica.

Esta historia está basada en hechos reales. Una niña de 3 años conoció al lobito Mystere y lo tuvo de mascota. Sin embargo, cuando decidieron producir la película, el reparto prefirió a una actriz de al menos 8 años. Esto deja entrar la ambigüedad.

Yo no me fijé en que se basaba en hechos reales. No me di cuenta hasta los créditos del final. Así que me sentí muy identificado con Vicky porque pensaba que también era autista, como yo. Nos presentan a la niña con unos auriculares enormes, y no sabemos si está escuchando música pero igualmente puede oír a su padre. Además, son auriculares de Pokémon, y el creador de Pokémon es autista también. No sé si Vicky es autista y tampoco es asunto mío, pero esto es irrelevante a la trama.

Así pues, ¿a qué alude el título? Aparte del lobo que ella esconde durante un par de escenas, ¿qué es el secreto de Vicky? El lobezno simboliza el trauma de la soledad. Una vez el bosque ha reconocido la necesidad de la niña, Vicky se puede volver a relajar frente a su padre. ¿Por qué sus muestras de mutismo situacional recuerdan tanto al autismo? Porque Vicky sufre mucha ansiedad, y las características del autismo más conocidas no son en realidad rasgos de autismo, sino rasgos de ansiedad en gente autista.

Puesto que en esta historia los lobos no son enemigos, el antagonista será aquel que odia a los lobos. Se explica bien en las escenas de los ganaderos, sin caer en el maniqueísmo. Llegas a entender que esta gente vive de su labor y no se van a matar al monte porque sean unos psicópatas. El drama viene de unas motivaciones donde ningún bando puede ceder.

Se da una ironía en el ganadero principal. Él odia que los lobos entren en su finca sin permiso y se cobren sus piezas. Pero al final es lo mismo que hace él: entra repetidas veces sin avisar en la finca del protagonista porque se quiere llevar al lobo. ¿Quién es el depredador?

Hablando de incursiones en tierras ajenas, toda la película está grabada con una fotografía preciosista, pero el momento más reseñable es el ataque del lobo salvaje. Creo que la intención original fue recrear una noche americana, porque si esta escena ocurriera de noche tendría más sentido dentro de la secuencia de eventos. Pero no puedo culparles por dejar la luz natural: la composición es demasiado bonita como para apagar los colores por una mera actitud estética.

El humor viene de dos personajes cómicos: el Cuñado Pesado y el Maestro Cabestro.

El director, Denis Imbert, tiene amplia experiencia en comedia, así que el Cuñado Pesado sólo acaba siendo pesado para los personajes. Me recuerda al amigo del padre en El libro de piedra (1968), de Carlos Enrique Taboada. Un sarcástico que impide que el tono se vuelva demasiado desagradable.

Sin embargo, el Maestro Cabestro parece hecho exclusivamente para que se rían los niños. No considero que fuera realmente necesario para aligerar el tono. Casi me da lástima.

Por último, al principio parece que la veterinaria va a ser el nuevo amor del padre viudo, como en una película de Hallmark. Pero este es otro acierto de Mystere: no abre nuevos hilos hasta cerrar los anteriores. Y los cierra muy bien. La estructura del guion está envidiablemente bien construida.

En tiempos donde parece que sólo puedas hacer una historia de animales simpáticos con animación algorítmica, El secreto de Vicky te deja saborear un poco de aquel cine clásico sencillo que te hacía sentir bien.